Lunes 29 de abril del 2013.
Después de pasear y tener una dosis de la China antigua, el
siguiente punto era la capital. No sé qué piensen las personas que hayan tenido
la oportunidad de estar en Beijing y en México D. F., pero en lo particular
pienso que son muy similares. Es cierto que la Ciudad de México es mucho más
grande y por ende concentra más gente (6000/km cuadrado a comparación de
Beijing con 1200 personas por km cuadrado), pero es en la movilidad de la
ciudad en lo que se me hizo muy parecido.
Líneas sin fin del metro, colas de
gente, el centro siempre lleno (天安门Tian'an Men), comercios en todos
lados, puestos de comida... En fin. La mayor parte de nuestro tiempo la
concentramos en el centro de la ciudad y los templos más conocidos de Beijing: 天松(Tian Song o
Templo del Cielo), 雍和宫(Yonghegong o Templo Lama, 颐和园(Yiheyuan o
el Palacio de Verano ¡ahí pudimos caminar sobre un lago congelado!), entre otros.
No perdimos la oportunidad de ir al
Cubo de Agua y al Nido del Pájaro, hay muchos vendedores en la zona que aún
quieren venderte souvenirs ¡de hace 5 años! Lo peor de todo es que te quieren
cobrar más de 20 kuais ¡por pieza! Lo que hice fue decirles, en chino, que eso
ya había sido y que si querían que se los comprara, les daba un kuai. No
cayeron, pero nos reímos.
Siendo la capital de China, Beijing
es un lugar muy chino. Es una ciudad china. Me explico: Mientras que Chongqing,
Shanghai y probablemente otras ciudades grandes fueron hechas a semejanza de
las grandes urbes del mundo, Beijing es una ciudad a lo chino. La estructura,
las calles, la arquitectura. es China.
Eso aunado a que ahí se concentra el
poder político del país. Sientes como el paso del tiempo es más lento que en
otros lugares, percibes una energía que conglomera modernidad y una China que
no ha desaparecido. Una China que intentó derribar sus costumbres ancestrales
durante la década de los sesenta y no lo consiguió y la apertura a un mundo
llenó de excesos derivados del dinero.
En otro tema, el ir a Beijing
también significa ir a la Gran Muralla. Nosotros supimos que hay 3 lugares
cercanos a Beijing a donde se puede ir, la más conocido es 八达岭 (Badaling), 慕田峪 (Mutianyu) y
金山岭(Jinshanling). La primera es la opción menos recomendable debido a que
siempre hay mucha gente, está muy restaurada, la menos demandante físicamente y
la que tiene menos vistas. Nosotros decidimos ir a Mutianyu que recién fue
restaurada, hay menos gente y no necesitas de mucho esfuerzo.
Hay muchas cosas que decir sobre la gran
muralla, muchos pensamientos. El primero que recuerdo es preguntarme ¡¿qué
tanto miedo debieron tener los chinos de las invasiones mongolas para construir
una muralla de tal tamaño encima de una montaña?! Segundo: todos conocemos y
hemos visto imágenes de la muralla en verano, todo verde y un sol espectacular.
Pero pocos tienen la oportunidad de verla con nieve. No tiene idea de la
imagen. Estar encima de la muralla, ver las montañas, la ciudad, mientras
platicas con tus amigos y comes un tentempié. Pocos muchachos, pocos.
En Beijing pude también probar
comida de 乌鲁木齐 (Urumqi, capital de la región autónoma de 新疆Xinjiang) y el
famoso pato laqueado pekinés (que en realidad no me pareció tan rico).
Ricardo y yo fuimos a la embajada
mexicana y Xabier a la uruguaya. Nos entrevistamos con el encargado cultural,
dimos nuestras impresiones sobre nuestra estancia, la beca, la convocatoria y
nos fuimos, fue muy breve. Xabier logró conseguir dos remeras del Uruguay para
regalar, yo sé que al final nos las va a dar a nosotros, solo tenemos que ser
pacientes.
En Beijing dijimos adiós a la pareja
rumana-australiano y nos dirigimos al aeropuerto de Beijing para emprender el
regreso a la gélida, gris y sucia Xi´an.
¡Saludos desde 西安!
Me había preguntado cuándo irías a la Gran Muralla y bueno, por fin :) es uno de esos lugares a los que quiero ir, caminar sobre ella, detenerme y sentirme pequeño, muy pequeño. Debe ser algo imponente y majestuoso.
ResponderEliminarCuando estés por acá te pediré ayuda para ir planeando un viaje.
¡Sigue divirtiéndote mucho!